Desde hace casi 8 años, un grupo de personas de Rubí que quieren nuestro territorio y el patrimonio cultural de la ciudad ha estado haciendo una gran labor de búsqueda de nombres de lugares populares que, en muchas ocasiones, han desaparecido y están sólo en la memoria de las personas de más edad.

Estos nombres de lugares son los llamados topónimos, es decir, las denominaciones con las que, especialmente en la primera mitad del siglo pasado, los payeses, cazadores y hombres de campo en general describían el territorio donde vivían y que pisaban. Podemos distinguir nombres de campos o viñas ('vinyes del castell', vinya del Tarradelles', camp del Mirot'...), de caminos ('camí del Segataire', 'camí de la peça del Mates', 'camí de la vinya del Vicenç Sec'...), bosques o agrupaciones vegetales singulares ('bosc de la Mare', 'bosc del Govern', avellanosa del torrent de Can Roig'...), de torrentes ('torrent de Can Xercavins', 'torrent de Cal Cairot', 'torrent de la Pola-va-calenta'...), de montículos y elevaciones ('carena del mig', 'pujada del Miret', 'les muntanyes russes'...) o de fuentes ("de la Magnèsia", "del Coco", "de la Garsa"...) etc.

No obstante, en esta ocasión nos centraremos en la evolución de las denominaciones de plazas, calles y lugares ligados al núcleo urbano de la ciudad, ilustrado con imágenes y evolución de un valioso patrimonio oral y cultural.